Valencia Noticias | Agencias.- El todavía presidente en funciones de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, ha reconocido este domingo que en los últimos días de negociaciones para investir un presidente “formaba más parte del problema que de la solución” y por eso ha “dado un paso a un lado”. Lo dijo en rueda de prensa tras concluir el Consejo Nacional de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), previo a la investidura de Carles Puigdemont como presidente de la Generalitat, así lo informa la web de rne y de rtve.
“Cuando yo tenga la conciencia de que formo más parte del problema que de la solución, ya no seré problema.”, dijo Mas, que explica que, “fuese justo o no”, en las últimas horas, sí formaba parte de ese problema para avanzar en las negociaciones. “Yo no resto” en el proyecto soberanista, insistió, pero “tenía que ser lúcido y tener la consciencia de lo que se estaba jugando en este país; me tenía que apartar para no ser un problema”.
El presidente en funciones de la Generalitat recalca que la decisión de apartarse de la presidencia ha sido “decisión propia”, que no ha respondido a “exigencias” y la calificó como una decisión “equilibrada” y “digna”.
Avance del proceso soberanista
Entre aplausos, gritos de “independencia” (“nunca me habían aplaudido tanto como el día de mi dimisión”) y una larga ovación al finalizar el Consejo Nacional de CDC, Mas justificó el proyecto soberanista en las urnas del 27D, que fueron tomadas por los soberanistas como un plebiscito y en las que participaron un 75% de los catalanes.
“Fue un resultado excepcional”, reconoció, insistiendo que “en esas condiciones, el proyecto soberanista sacó mayoría absoluta. Estamos ante una circunstancia histórica”. A pesar de que ambas listas obtuvieron un total de 72 escaños del total de 135 (62 de JxSí y 10 de la CUP), los votos al independentismo rozaron el 48%. Para Mas, “este proyecto soberanista es el único proyecto en Cataluña que sea bueno; no hay un proyecto alternativo y sólido como éste”.
Sin embargo, reconoció que en las últimas horas ha habido decisiones muy complejas. “Nos hemos jugado todo calculando los riesgos, pero sin estar asustados, sin dejarnos vencer sobre el miedo y sin cálculos meramente electoralistas”.
Por eso, lo que más le “pesaba” en las últimas horas es que siendo “el momento más trascendental e ilusionante de Cataluña, no seamos capaces de encontrar una solución para que este proyecto tenga un camino hacia adelante”.
“Yo estaba preparado para ir a las elecciones”
“Yo estaba preparado para ir a las elecciones”, dijo Mas. “El viernes trabajé en la convocatoria de las elecciones y el diseño de la campaña electoral para el 6 de marzo, pero no lo hacía de corazón”, añadió. Mas considera que Cataluña se encontraba en un momento que “nunca había tenido antes”, por la fuerza de su proceso soberanista, y se preguntaba “por qué ponerlo en riesgo”. Finalmente, dijo que “quien no cree en los milagros no es realista”.
“Brindar por la mala salud de Cataluña”
Mas hizo una crítica directa al Gobierno de España, que revindicó un “Ejecutivo fuerte para hacer frente al independentismo”. Dijo que “los que habían sacado el cava para brindar por la mala salud de cataluña tendrán que volver a guardarlo”. “Sabéis que ahí, en las últimas semanas, decían con entusiasmo que Cataluña se estaba hundiendo; estaban tan entusiasmados que se estaban relajando, pero a partir de ayer volvieron a saltar todas las alarmas”, insistió.
Por último, hizo referencia a los discursos del Gobierno y de los partidos contrarios a la independencia de Cataluña como “lenguaje amenazante”. Por su parte, dice, hay “casi amenaza, agresión”, mensajes de “os estamos vigilando y controlando”, pero les anima a que “se tranquilicen, que se serenen y que no corran tanto” a pesar de que el proceso soberanista va a seguir hacia adelante.