Vitor Faverani se despidió este miércoles de del Valencia Basket, y quiso hablar a la que ha sido su afición, “la afición fue mi motivación más grande. Te levantas cada mañana, y lo que te motiva es la afición, que vengan a verte, y con lo que tenía aquí, sabía que cada mate que iba a hacer los aficionados me iban a aplaudir”.
El pívot comenzó la comparecencia comentando que “no me he preparado nada porque hablo del corazón cuando le digo al club que mil gracias por la oportunidad de irme a entrenar una semana allí, la que fui. Gracias por todos los momentos que he tenido aquí, por ficharme y permitirme volver a jugar en la elite del basket. A los compañeros, porque si ellos nada de eso es posible. A los aficionados, porque es brutal el apoyo y el cariño que me demostráis cada día, espero que lo sigáis haciendo en la NBA”.
Faverani lo resumió comentando que “todas las gracias del mundo es poca, mi corazón siempre será un poquito taronja”.
Sobre cuál es su mejor momento, “me quedo con muchos momentos que pasan durante la temporada, en viajes, risas con los compañeros, no hay un momento, hay muchos momentos, sin ellos no podría dar ese paso hacia la NBA”.
Sobre sus opciones de volver tras la NBA, “Valencia Basket me dijo que siempre será mi casa, y eso siento. Si algún día vuelvo a Europa y me dan la oportunidad, estaría encantadísimo de estar en Valencia”.
Sobre si este era el momento de llegar a la mejor liga del mundo, “ningún jugador puede decir que no a una oportunidad como esta de los Celtics. Está claro que si no fuese para ir al otro lado del charco no me moverá de Valencia. Esto no es cambiar de equipo, esto es cumplir un sueño y lo haré”.
Faverani fue preguntado por si cree que en el Boston Garden se repetirían los gritos de MVP, “eso queda un poco lejos (ríe), me daré cuenta de lo que me está pasando cuando pise allí el primer partido. Abriré los ojos y diré ‘ya estoy aquí’, con trabajo y profesionalidad lo haré, lo del MVP ya se lo dejó a ellos”.
El presidente del Valencia Basket, Vicente Solá, presentó a Faverani como un jugador que “ha experimentado un trabajo tan importante dentro del club que además de ganarse el cariño de la afición, ha ganado una oportunidad. Es triste porque se nos va, pero es una alegría porque va para cumplir un sueño. Esa es nuestra satisfacción”.
VLC Ciudad / Redacción