Valencia noticias | Agencias Después de que se difundiera que se trataba de una división de 3.500 mujeres preparadas para asesinar a los enemigos del régimen, un entrenador habla sobre las verdaderas practicantes de “ninjutsu”
Un arte marcial está extendiendo su popularidad en Irán, sobre todo en mujeres de distintas edades que pueden practicarlo sin infringir ninguna de las estrictas normas de la Sharia, ya que requiere el uso de “keikogi”, un uniforme tradicional que debe cubrir todo el cuerpo durante el entrenamiento.
El régimen de entrenamiento de ninjas iraníes es bastante similar a los de otros practicantes de artes marciales de todo el mundo. Faraji, que entrena tanto a hombres como a mujeres, indicó que viajó a otros países, entre ellos Rusia, para intercambiar sus conocimientos con otros expertos en el ninjutsu.
En ese mismo reportaje, Faraji desmintió una historia publicada años atrás por medios internacionales sobre el entrenamiento de “asesinas profesionales”.
En quella publicación se hablaba de “la nueva arma iraní”: una división de 3.500 mujeres ninjas capaces de manejar todo tipo de armas y destrezas.
“Somos una instalación deportiva, realizamos nuestros entrenamientos de acuerdo con las normas, aprobadas por la Federación de Artes Marciales de Irán y por la Sociedad Internacional del Ninjutsu. No soy un terrorista, soy entrenador”, afirmó Faraji.