Este miércoles entraba en vigor en México una nueva ley que prohibía a los circos utilizar animales silvestres en sus espectáculos. Una medida –aún inexistente en algunos países europeos como España– que habría mejorado la vida de Reza, un león que tras dejar de ser útil quedó confinado durante 13 años en una jaula de 3×1,5 metros en Francia.
Al igual que Reza, en Europa hay cientos de tigres y leones –usados en circos, anuncios, películas o contrabando– que suelen estar encerrados en pequeñas jaulas en las que no se atiende a sus necesidades básicas. Uno de los principales problemas para su rehabilitación es la falta de centros de rescate apropiados.
Para solucionar esta deficiencia, AAP Primadomus en Villena (Alicante) ha abierto sus puertas a estos grandes felinos. Sus primeros inquilinos son el propio Reza, la leona Aya y la pareja de tigres Jai y Radja.
Tras ser rescatados de un circo francés en quiebra en mayo de 2015, fueron atendidos por los problemas físicos y emocionales que su anterior vida les causó. Una vez recuperados, estos animales disfrutan ya de las instalaciones al aire libre.