Como un chiquillo más de aquellos que Joaquín Sorolla retrataba en sus obras, el pintor se crió huérfano y al amparo de sus tíos en las calles del barrio de La Seu de Valencia. Incapaz de sentir cualquier tipo de interés hacia el oficio que ‘le tocaba’ por herencia, la cerrajería, se volcó en la pintura uniéndose a la Escuela de Artesanos y matriculándose posteriormente en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos de Valencia con tan sólo quince años.
Con obras como ‘Defensa del Parque de Artillería de Montelón’ o ‘El crit del palleter’ sobre la Guerra de la Independencia el autor se da a conocer con un estilo realista y una obra melodramática y oscura. Pero será sin duda, su original estilo pictórico conocido como ‘luminismo’ el que marque y caracterice sus colecciones. Sin olvidar sus orígenes en ‘la ciudad de la luz y del color’, los temas de la mar, la playa y naturaleza se convierten en el objetivo de su mirada y pensamiento intentando captar en ellos el momento fugaz de la luz con un colorido vibrante y un estilo suelto y vigoroso.
Es en esta línea de escenas cotidianas y paisajistas de la vida mediterránea que presenta pinturas como ‘La vuelta de la pesca’, ‘La playa de Valencia’ o ‘Triste Herencia’. Sería en 1911 cuando alcanzara el acuerdo con la Hispanic Society of America por el que realizaría catorce paneles de grandes dimensiones que representaban secuencias cotidianas o representativas de provincias españolas y portuguesas. Necesitó siete años para trabajar en la colección hasta que sufrió un ataque de hemiplejía que le apartó definitivamente de los pinceles. Sería antes de ésto cuando Valencia le nombró hijo predilecto y meritorio y se le dio su nombre a una calle.
La figura de Sorolla como medio para impulsar el arte valenciano
Este año conmemoramos el 150 aniversario desde que nació Joaquín Sorolla, uno de nuestros artistas más internacionales y el Consell no lo ha pasado por alto. “Para la Generalitat, recuperar la figura de nuestros más insignes personajes históricos es una buena oportunidad para la recuperación de la memoria colectiva” declaraba la consellera de Cultura, Mª José Catalá durante el acto de conmemoración del artista.
La Consellería de Educación, Cultura y Deporte ha querido arropar la obra de Sorolla como medio para fometar el conocimiento y el aprecio por el arte y la cultura valenciana. Así, la Generalitat impulsó la creación de la sala dedicada al insigne pintor en el Museo de Bellas Artes de Valencia enmarcada en una nueva política cultural. El alcance del fenómeno Sorolla se ha visto plasmado también en la creación de la Institución de Estudios Joaquín Sorolla desde el Consorcio de Museos de la Comunitat, que organizan pequeñas muestras y análisis académicos de su producciónDesde un punto de vista más técnico, hace cuatro años que la Generalitat, de mano de CulturArts y el Instituto Valenciano de Conservación y Restauración de Bienes Culturales (IVC+R) estudia la técnica del pintor con un estudio sin precedentes en España tomando micromuestras de los lienzos.
Como resultado se ha dado a conocer que Sorolla utilizaba una paleta mucho más rica en sus obras pasisajísticas frente a los escasos que usaba en sus retratos. Además, la consellería ha impulsado la restauración de 32 dibujos de las ‘Visiones de España’ gracias a la colaboración del Instituto de Ciencias de los Materiales de la Universitat de València. Este estudio revela que los colores más utilizados por el pintor fueron el blanco plomo y el bermellón, usando el blanco como base para el resto de 
colores.
Futuro Museo Sorolla de Valencia
La consellera Mª José Catalá, anunciaba el pasado mes de octubre la puesta en marcha de un proyecto para inaugurar el Museo Sorolla de Valencia con el fin de aprovechar el reclamo cultural y turístico del artista. La idea nace como consecuencia de la tendencia marcada por la Generalitat por preservar y potenciar a los artistas valencianos, y acercar así su obra a los ciudadanos. Con la voluntad de agrupar el máximo número de cuadros del pintor en un único museo abierto al público, la consellería se encargaría de reunir las colecciones de la Diputación Provincial, Fundación Bancaja, el Ayuntamiento de Valencia y contactaría con la familia Sorolla y con el Ministerio, principalmente con la Subdirección de Museos, por las piezas existentes en el San Pío V.
El Museo se instalará en el Centro Cultural que Bancaja posee en la Plaza de Tetuán, porque además de su céntrica situación y de ser muy conocido, ya tiene cierta vinculación con el pintor ya que acogió la exposición ‘Visiones de España’, que trajo por primera vez a España los 14 grandes paneles que Sorolla realizó.
Desde la Fundación Bancaja han anunciado que ya se han detectado alrededor de unas 125 obras del artista que podrían configurar un conjunto con suficiente entidad en cuanto a calidad y a cantidad para mostrarse en el futuro museo.
El Péndulo de VLCNoticias/Fuente: GVA.
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